Fantasía en Fandango

Fantasia sul Fandango es una composición de gran dificultad para corno bajo, clarinete y guitarra, destinada a dos intérpretes. La forma grande se divide en tres movimientos: Aria di Fandango, Berceuse y Fuga; el cambio de instrumento del clarinetista, sin embargo, no coincide con la articulación estructural de la pieza. Esto crea a la vista, incluso más que al oído, la sensación de una escansión formal diferente a la determinada por la tripartición. Aunque al escucharlo surge un lenguaje evocador e inteligible, el análisis pone de manifiesto características compositivas inesperadamente cercanas a la serialidad: el primer movimiento se basa, de hecho, en ocho de los doce sonidos de la escala cromática, mientras que el segundo movimiento se construye sólo con los cuatro sonidos restantes. Otro punto en común con el lejano mundo de las neovanguardias de finales del siglo pasado es el uso radical de los límites extremos de la textura de los instrumentos. Desde el punto de vista de la sonoridad, lo que surge es una investigación claramente marcada tanto por la interpenetración tímbrica entre el corno bajo (o el clarinete) y la guitarra, como por la copiosidad de los gestos instrumentales típicamente característicos de cada uno de los instrumentos. Sin embargo, en el transcurso de la pieza, estos gestos instrumentales son asumidos por el otro instrumentista en una especie de intercambio de papeles.